sábado, 8 de mayo de 2010

Carta de despido

De "Los empleados de Dios", de Leonardo Lobos. (Obra de teatro jamás publicada y presentada a nadie ni ante nadie)

…” en cuanto a usted mi querido amigo, no sea tan cacique, déjese querer, un poco de ordenes no le vienen nada mal, además hasta cuando quiere que la gente dependa de usted, no señor aflójese, desde mañana usted queda despedido, no vendrá mas a cumplir con su trabajo.”

Al día siguiente el hombre murió por exigirle a mas de lo que le tocaba, y por estar amargado en el trabajo de vivir.

A usted de Alejandro Lerner

Hasta que llegue su día, ese el mas especial que tienen las mujersitas, cuando notan que algo comienza a cambiar, voy a tratar de no rememorarla, y ese día que aun no llega que tan cerca y distante esta, ese día voy a volver a intentar, aunque ya de todo no quede nada y aun si otros brazon son los que la abrazan, no pierdo nada con volver a intentar, 3 regalos le voy a otorgar, eso si es seguro desde hoy hasta ese dia nada le voy a entregar, solo mis carencias y mi amistad, como ahora, queda ella querer ser mi amiga, compañera, colega, queda en mi tambien poder aguantar, son años complicados para los dos, mas para ella, pero acaso no todos pasamos por esa edad, ya se que no hay palabras que alcancen para hacerla entender que la cosa es dificil, solo le puedo decir que aguante un poco mas, es feo sufrir así, y es peor aun estar confundidos y no saber porque pasan las cosas, pero quiero que sepas que todo pasa, despues lo entenderás, y el día de mañana cuando cumplas, que se yo 21 24 vas a pasar por las mismas cosas tal vez y vas a soñar y vas a sufrir, pero que te quede el consuelo si te sirve de algo que yo nunca voy a permitir que te hagas mal, voy a protejerte siempre en la medida que me dejes, y aunque nunca tuvimos nada entre los dos, quiero dejarte esta letra, sin pretender nada, solo me aferro a la ultima esperanza de que entiendas que lo mio es de verdad. Hay días en los que pienso que nuestra historia, si algún día se concreta, podría ser mas conocida que la de Romeo y Julieta, sin muertes tempranas, pero si ésta nos sorprende y me amás como te amo, podriamos ser como los caballitos de mar, y no podriamos vivir sin el otro,pero ya tengo la solucion para poer soportar la ausencia, yo, la tuya con el colgante que me regalaste, vos la mia, vos la mia sabrás con que.
Mi regalo ultimo, hasta tu día especial.


A usted

Nos dijimos tantas cosas
que no entiendo su silencio
cuando no me dice nada
después de un día de amor
cada uno en una cama
tan vacía y tan lejana
que no entiendo porque
tenemos que estar
otra noche mas de frío
de ilusiones postergadas
otra noche mas de besos
que se llevará mi almohada
cuanto mas fácil sería que usted
acepte que ya es mía
como es mía la esperanza de volver
de volver a verla a usted
de volver a verla a usted
de volver a verla a usted
y cualquiera de estos días
tomaré la iniciativa
gritaré por la avenida nuestro amor
y cualquiera de estas noches
yo le llevaré mi cuerpo
para que haga lo que quiera
y no sentirme un mendigo
que le ruega por su amor
otra noche mas de frío
de ilusiones postergadas
otra noche mas de besos
que se llevará mi almohada
cuanto mas fácil sería que usted
acepte que ya es mía
como es mía la esperanza de volver,
de volver a verla a usted,
de volver a verla a usted,
de volver a verla a usted.


Alejandro Lerner.

martes, 4 de mayo de 2010

La niña de mis ojos

La niña del vestido blanco y cinta azul lleva en sus manos un ramo de rosas rojas, va condenando a los hombres que pretenden ser su compañero, camina pronto a ser la mujer mas buscada, la mujer del mañana será esa niña que yo divisé primero, de la que no soy dueño de nada de lo que a ella pertenezca, pero cuantos solos de amanecer son solo nuestros, cuantos gestos, sus dos llantos y mi desconsuelo, su sonrisa pujante, es todo nuestro; aun la veo caminar por su vida, la veo mirarme de lejos, de otro será la suerte cuando llegue su momento, ni siquiera yo seré el mismo al escoger ella su tiempo, ya se irá la marea con mi lamento, cuando un buen día el sol nos descubra mirándonos a los ojos aunque sea en un cuento.

Cuando yo me empiece a quedar solo

Tendré los ojos muy lejos
Un cigarrillo en la boca
El pecho dentro de un hueco
Y una gata medio loca
Un escenario vacío
Un libro muerto de pena
Un dibujo destruído
Y la caridad ajena
Un televisor inútil
Eléctrica compañía
La radio a todo volumen
Y una prisión que no es mía
Una vejez sin temores
Y una vida reposada
Ventanas muy agitadas
Y una cama tan inmóvil
Un montón de diarios apilados
Y una flor cuidando mi pasado
Y un rumor de voces que me gritan
Y un millón de manos que me aplauden
Y el fantasma tuyo, sobre todo
Cuando ya me empiece a quedar solo.

Charly Garcia