viernes, 28 de octubre de 2011

No hay mas formas


Me gusta mucho improvisar la vida y cometer errores de los cuales pueda aprender, como la noche anterior donde solo imagine algo, donde te miré un instante y vi que reflejabas algo, algo que no estaba a la vista de todos, pero sí de quienes están atentos a los demás. Entonces empecé a contarte mi vida al revés.
Por eso me hubiese gustado comenzar de otra forma, como comencé esa noche, tal vez contar mis cosas desde el final, desde el futuro que aun no llega y entonces decirte, "Así es mi vida al revés. Fue entonces que esa mañana morí, aunque esa madrugada la pase contándome anécdotas de mi juventud.”
No se como será, pero me gustaría imaginar que antes de morir pueda recordarte, tan perfecta y orgullosa, tan hecha a la medida de las personas que buscan algo que no encuentran, así surgirías, con un relato tal vez, una dedicatoria que diga “a la mujer que refleja horizontes” y luego contarte no de mi vida, sino de cosas que me sucedieron o de historias inventadas y ponerme a improvisar o a recordar algo como lo que voy a dejarte, de lo cual yo extraje muchas conclusiones.

Recuerdo otoños pasados y parece ayer cuando terminé mi etapa de investigación de la vida, me fui a disfrutar con gente distinta y conocí de primera mano a los demás y ellos me conocieron a mí. Me bastó solo un tiempo y al cabo de 1 año volví cansado de todo aquel circo social, fue cuando decidí hacer mi estudio de la vida por mi cuenta sin depender directamente de un mentor, siempre en contra con mis pares que buscaban imponer sus ideas. Tengo muy buenos recuerdos de estos últimos años, y conservo (aunque no veo desde hace tiempo) amigos que compartieron vivencias en la "experimentación social de veranos, peatonal y tragos", algo que inventamos nosotros. En fin, uno parece hacerse mayor, pero siempre se apoya y recuerda con cariño el pasado, y claro, un día nos miramos en el espejo y nos damos cuenta que nos hemos convertido en alguien similar a nuestros mayores, esos que mientras nosotros estamos luchando contra la adolescencia, se creían universitarios con mucha experiencia (a pesar que solo cargaban con meses de universidad).Hacía tiempo que no escribía un recuerdo así, no se porque la comparto con vos, supongo que será que pienso que a vos también te viene a la memoria, el recuerdo pasado, supongo que debes añorar mucho tu infancia con amigos.Ahora que pasó el tiempo puedo decir que estoy curado de espanto, pero me di cuenta que a veces cansa vivir pensando, imagino que te paso y te dio ganas de salir corriendo; después de ver esta realidad sentí que nuevamente tenía que escalar una montaña emocional y olvidar (nada que no hubiera hecho antes) pero esta vez sin trampas es decir, por ejemplo sin mirar nuestros amores pasados, lo pasado quedo allá en la oscuridad… y aunque nos digamos esto sabemos que a veces pega cuando vemos una foto u oímos una canción o lo que sea, regresan esos estúpidos pensamientos y lo que es más complicado es que después de tantas y tantas cosas con esa persona ya no existe comunicación ni un "hola que tal?" ni nada… eso es algo que emocionalmente me desarma mucho, debo admitirlo, se que en esta vida nadie esta atado a nadie pero ese silencio puede ser destructivo.Un día una amiga me dijo una frase que me dejo pensando… Leo lo que nos define como personas no es lo que tenemos por dentro sino lo que hacemos! y eso me ayudó a entender que era absurdo, tonto y sin sentido perdonar tantas cosas en nombre del “amor” me ayudó a conocer más gente y a aceptar que simplemente no valía la pena (con todo lo que eso significa). Ahora mismo estoy redefiniendo muchas cosas y como dice otra amiga ¡pareciera que hubiésemos vivido mucho y en realidad no es así! Tengo el recuerdo de esas dos amigas que aun están perdidas. La semana pasada pasé por Santa Fe y me las encontré, junto con un grupo de gente que también estuvieron algunas veces conmigo, en fin mis amigas se llaman Abril y Cielo, las dos estudian lo mismo, van a la misma facultad, viven en el mismo departamento pero son muy distintas una de otra, mientras que Abril opina que la barba que me deje me da un toque bohemio e interesante, Cielo dice que no me favorece para nada, así que estando juntas viven en mundos diferentes. Abril es una chica de 21 años con unos 7 Kg. de mas (nada), ella probó todas las dietas que se conocen, bajaba unos kilogramos que a la semana recuperaba, eso le enseño a comer bien y enterarse que a los verdaderos hombre no les interesa el físico de una mujer aunque a la mayoría les interesen sus partes delanteras o traseras.Cielo por otro lado tiene sus jóvenes 19 años, una chica precoz que terminó la secundaria con solo 16 años, repito precoz pero no inteligente, dado a que no se siente conforme con su cuerpo, ella piensa que es desproporcionada, dado al volumen de su busto y también cree que sus pies son enormes, siempre compra zapatos una talla mas chica, cosa que la hace caminar con pasos cortos y rápidos, como si le fuese a molestar menos, esto la obliga a caminar mirando el piso haciendo que su hermoso cabello le moleste el poco ángulo de visión que le queda; todo esto se lo hice saber una noche de café hasta altas horas y les dije además que no estaba mal y que todos tenemos dentro una pequeña Abril y una pequeña Cielo. Hay días que somos Abril, y mostramos nuestro mejor lado sin importar lo que no nos favorece, y otros días somos como Cielo y entonces nuestra vida es una marioneta esclavizada a la opinión de los demás y nos volvemos víctimas de nuestro peor enemigo, nosotros mismos.

Si cometemos ese error va a ser increíble ver como todo lo que uno construyo, se desarma tan rápido, y duele saber que uno colaboró en su destrucción, pero nos quedará el consuelo de saber que se puede volver a empezar de 0 en algunas cosas, y hay otras que no se volverán a construir, como mi simpatía por los demás, porque no tendría sentido si al fin todo el mundo siempre quiere disfrutar de nuestros dones pero no ayudar a acarrear nuestras miserias. No obstante necesitaremos un Simon de Sirene que ayude a cargar nuestra cruz porque para ese entonces estaremos cansados de los Pilatos que nos condenen.